La otra tarde me tocó ir hasta Haneda a recoger a un amigo que venía a visitarme. Como siempre soy de llegar con tiempo (prefiero mil veces aburrirme a correr a última hora 😅), me di una vuelta por el mirador del aeropuerto. Mucha gente me lo había recomendado y sí, tenían razón: ver los aviones despegar y aterrizar tan cerquita es hipnótico. Me quedé un buen rato como un niño mirando juguetes nuevos ✈️👀.
Después de la recogida oficial, como el hotel de mi amigo estaba cerca de Haneda por 1 día (luego se iría a otro más céntrico), decidimos dar un paseo sin rumbo fijo. Me contó que prefería hacerlo así porque los viajes largos le matan ✈️💤 y nada más llegar quería dejar las cosas, estirar bien las piernas, relajarse del viaje, comer algo rico 🍜 y dormir a gusto.
Y ahí es cuando pasó la magia: nos encontramos con el Templo Anamori Inari. ¡Un verdadero tesoro escondido!
El camino rojo que atrapa
Lo primero que vi fue un montón de torii rojos en fila india. Pasar por debajo de ellos es como meterse en un túnel mágico. Obviamente saqué el móvil como buen turista nivel 1000 📸😂. No es tan gigante como el famoso de Kioto, pero precisamente eso lo hace genial: nada de multitudes, ni palos selfie chocando, solo calma.
Zorros guardianes everywhere 🦊
El templo está dedicado a Inari, y ya sabéis lo que eso significa: ¡zorros por todas partes! Bueno, estatuas de zorros, claro. Algunos serios, otros con cara de “yo sé todos tus secretos humanos” (y probablemente los sepan). Estos kitsune actúan como mensajeros de la deidad y vigilan cada rincón del lugar. Yo ya les pedí que me trajeran suerte, que nunca sobra.
De aviones a templos en 5 minutos
Lo que más me sorprendió fue el contraste. Estaba hace nada rodeado de pantallas, anuncios y el bullicio de un aeropuerto internacional… y de repente, silencio, linternas rojas y tradición japonesa. Es como entrar en otro mundo con solo doblar la esquina. Japón nunca deja de sorprenderme. 🙌🇯🇵
Mi recomendación viajera ✨
Si algún día tienes que pasar por Haneda, guarda un rato para visitar este templo y disfrutar de la tranquilidad entre los torii y los zorros guardianes. Y si además os gustan los aviones, no os perdáis el mirador del aeropuerto, ¡os aseguro que es un plan redondo! ⛩️✈️
Comparte tu experiencia 💬
¿Has descubierto alguna joya escondida en Japón? Cuéntamelo en los comentarios, a través de Instagram o directamente por email, ¡me encanta descubrir nuevos rincones gracias a vuestras historias!
